Así lo afirmó Martín Policante, uno de los dos tenedores de las tierras a las que accedió la Sociedad El Azufre.
El Centro de esquí Boutique El Azufre generó en un sector cierta controversia desde su llegada a nuestro departamento. Lo que más ruido hizo fue la cantidad de tierras en plena cordillera a la que pudo acceder y el origen de la misma.
Desde Malargüe a Diario dialogamos con Martín Policante, uno de los dos puesteros malargüinos que vendió su posesión de la tierra a este emprendimiento. La familia Policante lleva sus animales a esa zona desde 1985, primero lo hizo su padre y ahora Martín continúa su legado.
“No son nuestras las tierras, sí tenemos derecho a usar sus pasturas, eso nos habilita a subir todos los años. Lo que se negocia con la firma es el derecho de posesión, ellos pueden trabajar pero no cambia en nada, no nos chocamos; son dos actividades que dependen de la misma materia prima, que es la nieve, el agua”, manifestó Martín a este medio y explicó que la pastura necesita taparse de nieve y el esquí también, “son dos cosas que no se molestan, tienen sus tiempos, sus temporadas; cuando baje la nieve subimos a la veranada; empezamos a subir a fines de noviembre; ellos nos informan cuando baje la nieve, las vegas están negras porque es pasto que está tapado, quemado y cuando empieza a aparecer el verde ya empezamos a subir. Para bajar, lo hacemos a mediados de abril”.
Respecto a la relación que tienen con la sociedad El Azufre, Martín manifestó que es la mejor: “Llegaron respetando nuestra postura en esa veranada, jamás hicieron nada, no nos han corrido; ha cambiado totalmente con los servicios que ellos nos prestan, ha cambiado allá, siendo un lugar que es tan lejos, no había nada, poca comunicación pero hoy día es diferente. La ruta está igual que siempre, llegando a la cercanía del complejo hay algunas mejoras que han hecho ellos con sus máquinas”.
Además de los Policante, en esa zona, que comprende 12 hectáreas, estaba la familia Cabus, “primero estuvo don Eduardo, que no está más, sino su hijo Sergio. Doce mil hectáreas forman nuestra veranada junto con la de Cabus; en el mismo tiempo comenzaron a trabajar, a llevar a los animales pero a Sergio, de un momento para otro, lo desalojaron de su veranada, no pudo subir más…nadie salió a defender a este criancero, el único que lo defendió fue su abogado…esto fue hace 10 o 12 años, lo sacaron de su lugar donde tenía su derecho y nadie salió a defenderlo ni lo informaron. Sólo lo sabemos los que estábamos allá. Cuando El Azufre se fija en esa zona de la Cordillera, lo reconoce como dueño de la posesión, para Cabús es algo bueno, muy diferente a lo que le pasó anteriormente y decide vender su parte, cede su sesión de derecho. Esas 12 mil hectáreas son de dos familias, Policante y Cabús”.
Por otro lado, Martín hizo referencia a otra familia que reclama por los derechos de posesión de dichas tierras: “La otra familia que reclama, es una persona que necesitaba veranada, que su domicilio real es en Buta Bellón, el señor Ávila, su veranada es el Mallán y, lamentablemente, esa veranada no es lo mismo que El Azufre; esta persona vino de buena fe que necesitaba veranada y de buena fe se le dio, alquiló, pasó el tiempo y le daba autorización a través de Ganadería para que pueda subir; después le dije que no le iba a brindar más la veranada, se pasó con guía de Gendarmería a la vega de Gendarmería; ahora nos enteramos que hace reclamo de la veranada pero eso es mentira porque en el último año de vida de mi padre él vino acá para que le diéramos veranada”.
Martín se autodefine como puestero, ya que cría ganado vacuno a diferencia de los crianceros que se dedican a las cabras, al chivito. “La gente que no conoce aquella parte, está creída de lo que dicen, pero falta que escuchen la segunda campana, lamentablemente no tenemos ese espacio, nosotros no inventamos nada, es la realidad de nuestra vida, de mi padre que me llevó para allá para seguir con esta misma actividad pero esa parte no la dieron a conocer porque no le servía a ellos. No hay 14 puesteros desalojados; el mismo (Celso) Jaque decía que había dos posesiones: Cabus y Policante, nunca han existido en esa parte de El Azufre otras familias”.
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