Estuvo acompañado por funcionarios locales, provinciales e incluso nacionales de la gestión anterior. En el acto presentó a todo su equipo y también se tomó su tiempo para mostrar todo lo que recibió, con un parque automotor destruido, espacios públicos rotos y sin terminar, edificios municipales abandonados, sectores donde falta equipamiento, destinos millonarios de dinero por mala administración, entre otros muchos puntos más.
En principio el acto de traspaso de mando estaba contemplado para que se realizara en la plaza San Martín pero ante la presencia de viento se mudó al gimnasio de la escuela Rufino Ortega. Allí se dieron cita funcionarios de nivel local, como así también intendentes de otros departamentos, legisladores, representantes del gobierno provincial e incluso nacional de la gestión anterior y obviamente vecinos, los cuales llenaron el amplio salón.
El acto, realizado ayer, comenzó con la sesión del Honorable Concejo Deliberante donde la vicepresidenta Silvina Camiolo fue quien le tomó juramente al nuevo intendente de Malargüe, Celso Jaque, teniendo en cuenta que el presidente Rodrigo Hidalgo estaba al frente de la intendencia. Concluido esto, el nuevo gobierno tomó la posta y les tomó juramento a los nuevos secretarios, para posteriormente presentar a todo el equipo de trabajo que acompañará en esta gestión.
También participaron del acto referentes religiosos, quienes hicieron uso de la palabra y dieron su mensaje a la nueva gestión.
Ya al momento de dirigirse a los presentes y con el apoyo de una pantalla a sus espaldas donde se iban mostrando imágenes, Celso Jaque hizo público lo que recibió. En este sentido dijo: “recibo una pesada herencia” y se explayó detallando cómo está el parque automotor, con muchos vehículos desmantelados. También mostró las obras de la gestión de Juan Manuel Ojeda que no se terminaron y cuestionó que se desconoce dónde está el resto de los materiales que faltan para terminarlas. Además, dio a conocer el estado de abandono de edificios municipales, como espacios públicos. Así mismo cuestionó que se les cambiaron los colores a obras como el Monumento al Criancero, lo cual no está permitido, acusó que se le sacaron las campanas al Reloj del Cincuentenario, detalló los millones de pesos que pagó el municipio por pedir préstamos a bancos y se refirió a trabajadores que recibieron categorías más altas, siendo que no les correspondía. Otro punto que trató fue sobre trabajadores que fueron incorporados en la última etapa y a los que se les vence el contrato, los cuales serán analizados de forma personalizada para saber si realmente son necesarios y si necesitan el trabajo. En su alocución no dejó de mencionar las denuncias que tiene la gestión saliente y que están siendo investigadas. Para ver el discurso completo pueden ver la transmisión en vivo de Malargüe a Diario a través de nuestro Facebook.
Un punto no menor al que se refirió Celso Jaque fue un agradecimiento hacia la funcionaria de la gestión anterior Paola Paleico, quien hizo de puente en la transición.
Después de este acto se enciende una luz de esperanza en la comunidad, porque si el pueblo de Malargüe no le renovó el voto de confianza a Juan Manuel Ojeda es porque su gestión no fue buena. Ya con un nuevo intendente Malargüe vuelve a soñar por un futuro mejor, con la esperanza de tener el Malargüe que nos merecemos.